3º BOLETÍN INFORMATIVO «EUROPA SE MUEVE» 25/11.
La UE reafirma su compromiso con Ucrania y el futuro del gobierno europeo se va definiendo
SE CUMPLEN 1000 DÍAS DE LA AGRESIÓN RUSA
La UE reafirma su apoyo incondicional a Ucrania: “Todo lo necesario durante el tiempo que sea necesario”
Madrid, 27 de noviembre de 2024
Lucía Conesa, Colaboradora del CFEME
El 19 de noviembre de 2024 se cumplió el milésimo día de la invasión rusa de Ucrania. Ese mismo día, el presidente ucraniano Volodímir Zelenski, compareció por videoconferencia en el Parlamento Europeo, donde recibió el respaldo de la mayoría de Grupos políticos de la cámara por su defensa de la soberanía ucraniana, el derecho internacional y los valores europeos.
La Unión Europea ha reafirmado su compromiso político y militar con Kiev, destacando avances significativos en el suministro de armamento. Josep Borrell, alto representante de la UE para Asuntos Exteriores y Política de Seguridad, confirmó que los Estados miembros han entregado ya un millón de cartuchos de munición prometidos en marzo de 2023, alcanzando el objetivo con ocho meses de retraso:“Entregamos el millón de municiones hace unos días, y seguiremos haciéndolo”, afirmó Borrell tras la reunión del Consejo de Asuntos Exteriores en formación de Defensa. Este avance refuerza las capacidades de Ucrania en el campo de batalla. Según el ministro alemán de Defensa, Boris Pistorius, la entrega ha contribuido a equilibrar la paridad en municiones entre Ucrania y Rusia, aunque subrayó que “esto no es suficiente”.
Pese a estos logros, persisten desafíos en la financiación del Fondo Europeo de Apoyo a la Paz, en gran medida debido a la oposición de Hungría a contribuir al mecanismo de forma voluntaria. Esta posición ha bloqueado la implementación de nuevas medidas de apoyo financiero, complicando la ejecución de propuestas como la creación de una unidad de coordinación en Kiev para las acciones europeas. En paralelo, la misión de asistencia militar de la UE (EUMAM Ucrania) ha entrenado a 65.000 soldados ucranianos, con el objetivo de alcanzar los 75.000 a finales del invierno. No obstante, las tensiones internas en la UE, en particular con el gobierno de Viktor Orbán, obstaculizan una mayor consolidación del apoyo.
El presidente ucraniano, Volodímir Zelenski, intervino ante el Parlamento Europeo para agradecer el respaldo y llamó a la UE a mantenerse unida frente a la agresión rusa. Zelenski expresó su esperanza de que 2025 sea «el año de la paz», mientras líderes europeos reafirmaron su determinación de apoyar a Ucrania “durante el tiempo que sea necesario”.
Este respaldo político, militar y logístico se complementa con iniciativas diplomáticas de otras organizaciones como el Consejo de Europa, cuyo Comité de Ministros reiteró el pasado 19 de noviembre su “apoyo polifacético” a Ucrania, comprometiéndose a la reconstrucción del país y a responsabilizar a Rusia por los crímenes cometidos durante la agresión. La propuesta de crear un tribunal especial para juzgar estos actos y el pago de reparaciones sigue en la agenda internacional.
Por otro lado, el Consejo de la UE, que reunió el pasado 18 de noviembre al Consejo de Asuntos Exteriores, decidió ampliar el ámbito de sanciones del marco de sanciones de la UE a Irán, en relación con su apoyo militar a Rusia en el contexto de la agresión rusa a Ucrania, así como por su apoyo a grupos armados en la región de Oriente Medio. Asimismo, se restringen transacciones vinculadas a puertos iraníes utilizados para el transporte de estos armamentos hacia Rusia, afectando instalaciones clave como los puertos de Amirabad y Anzali.
El Consejo también adoptó sanciones contra la naviera iraní IRISL, su director Mohammad Reza Khiabani, y tres compañías rusas involucradas en el transporte de armas iraníes. Josep Borrell destacó que Irán y China desempeñan un papel crucial en el esfuerzo militar ruso. En este contexto, los ministros discutieron la influencia de Corea del Norte y China, con advertencias de Alemania, República Checa y Lituania sobre las posibles consecuencias de entregas directas de armamento chino a Rusia.
Además de sanciones, el Consejo debatió cómo intensificar el respaldo a Ucrania. Borrell enfatizó en la necesidad de una respuesta europea militar, financiera y sancionadora más contundente tras los recientes ataques rusos. Gabrielius Landsbergis, ministro de Lituania, pidió un enfoque más decidido, calificando de insuficiente la estrategia actual y abogando por un mayor suministro de armamento y menos restricciones.
La reciente decisión de Estados Unidos de permitir a Ucrania atacar objetivos militares en territorio ruso con armas estadounidenses fue bien recibida por varios líderes europeos, aunque algunos, como Italia, mantienen una postura de uso limitado de armas en territorio ucraniano. Los países del G7 reafirmaron su compromiso con Ucrania, destacando la necesidad de imponer costos elevados a Rusia mediante sanciones y controles de exportación.
El consenso casi unánime en torno al conflicto en Ucrania, contrasta con la falta de consenso del Consejo de la UE sobre la propuesta de Josep Borrell de suspender el diálogo político con Israel, en respuesta a la situación en Gaza. Aunque Irlanda y España respaldaron la iniciativa, la mayoría de los Estados miembros optaron por mantener las relaciones diplomáticas. Borrell describió la situación en Gaza como «apocalíptica», pero subrayó que la suspensión de partes del Acuerdo de Asociación con Israel requería una mayor coordinación, dado que la Comisión Europea no ha tomado medidas concretas al respecto.
Todos estos debates en el seno de la Unión reflejan la complejidad de la política exterior europea, marcada por la necesidad de equilibrar sanciones efectivas, apoyo estratégico a Ucrania y posiciones diplomáticas frente a las crisis en Oriente Próximo. La decisión de reforzar las sanciones contra Irán y considerar el impacto de terceros países como China subraya la urgencia de una acción coordinada para afrontar amenazas globales.
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